Galería de mujeres notables: Carla Serena, ilustre viajera italiana Gallery of important women: Carla Serena, a celebrated italian traveller ARTICLE Spain
| Title | Galería de mujeres notables: Carla Serena, ilustre viajera italiana Gallery of important women: Carla Serena, a celebrated italian traveller |
|---|---|
| Is same as work | Galería de mujeres notables: Carla Serena, ilustre viajera italiana |
| Author | Unknown journalist (to be identified) |
| Reference | |
| Place | Spain |
| Date | 1884 |
| Quotation | |
| Type | ARTICLE |
| VIAF | |
| Notes | ['El logro de la notoriedad por el difícil camino de las\nperegrinaciones parecía estar vedado a la mujer, acostumbrada a no moverse un\npaso sin sus correspondientes guardadores y vigilantes. A pesar de esto, y\npendiente como se halla el gran problema de la emancipación del bello sexo,\neste ha querido demostrar que no hay senda por donde no siga ni ruta por donde\nno acompañe al hombre su competidor.\nLa admiración que causó Madame Pfeiffer cuando, en 1842,\npartió sola para la Palestina, sin otro objeto que estudiar estos santos\nlugares y escribir luego una narración de sus observaciones, se templó al ver\nque esta misma viajera dio después dos vueltas al mundo y apenas ha dejado\nlugar para nuevo asombro.\nEsto no obstante, la joven y elegante dama italiana, Carla\nSerena, cuyo retrato acompaña el presente número, ha logrado distinguirse y\natraer sobre sus viajes la atención de personas ilustradas y especialmente de\nlas corporaciones científicas relacionadas con esta clase de peregrinaciones.\nGracias a la invitación que recibió del Congreso\nAntropológico de Lisboa, celebrado hace tres años, tuvimos los españoles la\noportunidad de conocer de cerca y de oír de labios de esta ilustre viajera una\nde esas conferencias interesantísimas que, a una con sus obras, han contribuido\na labrar su merecida reputación en las capitales de Viena, San Petersburgo y\nParís. Con ocasión de su viaje a la corte lusitana, esta señora visitó varias\npoblaciones de España, y por último Madrid, donde la Sociedad Geográfica,\npresidida por el Sr. Cánovas del Castillo, hizo justicia a sus talentos,\nproporcionándonos el placer de escuchar, en francés correcto y elegante, una\nreseña del carácter, costumbres, leyes y organización de los pueblos que ha\nvisitado en sus expediciones.\nSegún su propio relato, Carla Serena dio principio a sus\nviajes en 1873, visitando la Exposición de Viena, con cuyo motivo escribió sus Lettres d’Autriche, que el emperador\nFrancisco José aceptó para su biblioteca particular.\nEn 1874 fue a Estocolmo, donde el rey Oscar II le dispensó\nespecial protección, trazándole un itinerario a través de Suecia y Noruega, y\nproveyéndola de abundantes cartas de recomendación. Resultado de este viaje\nfueron sus interesantes Lettres\nScandinaves, por las cuales mereció la medalla de oro del a sociedad Litteris et Artibus.\nVisitó luego la Rusia, Turquía, el Egipto, la Tierra Santa,\nla Siria, el Líbano y la Grecia, siendo miembro honorario del Syllogus, asociación para la enseñanza\nde las mujeres y para la cual escribió sus Lettres\nHelleniques.\nPasó después al Cáucaso, donde permaneció por espacio de dos\naños, estudiando el carácter y las costumbres de las tribus más fieras y\nremotas del mar Caspio y del mar Negro. Allí le sorprendió la guerra turco-rusa\ny llevó a cabo grandes actos de valor y abnegación que le valieron los más\nentusiastas plácemes de Alejandro II y del gran duque Miguel.\nCayó enferma en Bakan y no pudiendo regresar a su país, se\ndirigió a Persia, llegando a Teherán y permaneciendo allí el invierno por causa\nde las nieves, hasta regresar por el litoral Caspio y el Volga. Penetró en la\ncomarca de los Kalmukos, hospedándose en casa del lama o gran sacerdote quien\nle dio su bendición, y luego bajo las tiendas de los budistas y en un seminario\nde hermanos moravos. Regresó a Moscú y visitó al emperador de Rusia. Pasó luego\na Viena, donde recibió el diploma de miembro corresponsal de la sociedad de\nGeografía, así como a París, donde la Asociación geográfica le dispensó iguales\nhonores, después de oír una de sus más notables conferencias.\nEsta incansable viajera, como su antecesora Madame Pfeiffer,\nno comprende la vida sin el continuo movimiento, y la realización de un viaje\nno es más que estímulo para proyectar otros nuevos, que tiene el arte de\nreferir con la pluma, con tal verdad y relieve, que los lectores creen asistir\nrealmente a las escenas y cuadros que nos pinta.\nSus obras, cuando dé por terminadas sus tareas, serán un\ntesoro de instrucción y entretenimiento, pues por más que muchos de los pueblos\nque describe hayan sido ya estudiados por diferentes viajeros, la observación\nde la mujer es por lo general más fina y penetrante, y hay más frescura y\noriginalidad en sus narraciones.\n'] |
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